Tres de cada cuatro personas en México opinan que un arma en casa la vuelve un sitio más peligroso, de acuerdo con una encuesta de Defoe.
La situación de las armas en México es complejo. No se habla mucho de que la gente común y corriente tenga una relación estrecha con las armas, y sin embargo hay una gran cantidad de homicidios y ataques con arma de fuego. Las razones y las especificidades de esta situación son motivo de otra investigación. Lo que a nosotros nos interesó fue consultar a las personas mexicanas para saber si tienen cercanía con las armas.
La primera pregunta que planteamos fue la noción que acompaña a cierta noción sobre las armas como un elemento que hace que el entorno sea más seguro en la medida en la que estas están disponibles. Les preguntamos precisamente por la casa.
Ante la pregunta puntual sobre si un arma hace más peligrosa o más segura una casa, la respuesta fue clara: tres de cada cuatro personas en México opinan que un arma en casa la vuelve un sitio más peligroso. Solo el 23% dijo que la casa era más segura gracias a la presencia del arma. Y el 5% no respondió.
La siguiente pregunta fue plantearles, tomando en cuenta que sus datos personales son absolutamente confidenciales y que su respuesta tenía un fin únicamente estadístico, les pedimos que nos dijeran si en su hogar había un arma de fuego. La respuesta plantea de alguna manera una imagen de nuestra relación con las armas: solo el 7% de las personas en México aceptaron que en su casa tienen un arma.
En Estados Unidos, país que tiene una relación mucho más estrecha y compleja con las armas que el nuestro, las cifras son muy distintas. Allá, el 42% de las personas dicen que en su casa hay un arma. Además el 48% dicen haber crecido en una casa en la que había una arma y el 72% dicen haber disparado una arma de fuego alguna vez en su vida según datos del Pew Research Center.
En México, por el contrario, el 93% de las personas dicen que en su casa no hay armas. Del escaso porcentaje que sí tiene armas, consultamos sobre la propiedad.
El 68% dijeron que el arma es de su propiedad. El 18% en cambio dijeron que el arma es de otro miembro del hogar. Y 14% no saben o no respondieron.
Todos estos datos revelan que la relación con las armas en la vida cotidiana es muy distinta a la que otros países, en especial en Estados Unidos. Así como el acceso a compras de armas, hay que considerar los requisitos que hay que cumplir en México para la obtención de la licencia de portación de armas son mucho más extensos y cuantiosos que en el país vecino. No obstante, las armas de fuego siguen causando estragos en la sociedad mexicana.